jueves, 11 de febrero de 2010

Tu cumpleaños. El mejor día

Disclaimer: Bueno creo que aquí no hay disclaimer, está totalmente claro que Taylor me pertenece a Mí.
Bueno este es un homenaje de cumpleaños para Tay este 11/02/10
Ya sabes que te amamos!!

Summary: Te ofrece una mano, y te pierdes en esos deliciosos ojos castaños, mientras que esa gran sonrisa blanca te reconforta inexplicablemente. Taylor/Tú.

Bueno, así es este oneshoot va de cumpleaños a Taylor.
Pero eso no es lo único, está hecho para que te puedas identificar con el personaje, en realidad no soy yo, eres tú, la lectora, la que vive esta historia. Disfrútala!!


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Tu cumpleaños. El mejor día



Desperté, no tenía idea de donde estaba. Miré a mi alrededor confundida y con el ceño fruncido.

Entendía que este lugar en mi vida, lo había visto. No me dí cuenta por el lugar, sino por el tipo de ambiente que se sentía. No era el ambiente adecuado, con el que me había dormido.

Solo recuerdo que la noche anterior, me había ido a la cama y después, ¡desperté aquí!

¿Acaso, había caminado dormida? Talvez, pero la verdadera pregunta era ¿Dónde demonios estaba?

Caminé con paso vacilante, pero no por eso lento.

Donde había despertado, era una especie de restaurante, totalmente vacía, pero la puerta, estaba completamente abierta, tomé mi bolsa –que casualmente estaba al lado mío.

Había una tienda cercana, mientras me acerqué me dí cuenta que era una tienda de recuerdos. Había un estante en la parte exterior, en el que había de todo tipo de postales.

Me acerqué para tomar una y entonces vi donde me encontraba:

Hollywood ¿Hollywood? ¿WTF? Según yo hace unas horas antes me había acostado en mi cama, en mi casa a unos miles de kilómetros de aquí, y ahora unas 11 horas después –en realidad no tenía idea, por la diferencia de horarios-.

Dí media vuelta y confirmé mi descubrimiento. Se podía ver a los lejos el monte con las típicas letras blancas que decían HOLLYWOOD.

Mi estómago empezó a gruñir y estruje la blusa –nueva, jamás la había visto- a la altura de mi panza.

La migraña había empezado a surgir (por el hambre y la confusión).

Sabía que no traía dinero, abrí mi bolsa y vi que traía dólares, un momento, ¿dólares?, y no eran solo dólares, eran cientos de dólares.

¿Pero que había pasado anoche? Creo que la duda siempre vivirá en mí.

Tomé un autobús y me dirigí hacia Los Ángeles. Cuando mucho me tardaría unos 15 minutos en llegar.

Mientras avanzaba el autobús, miraba maravillada a las hermosas calles que pasaban frente a mis ojos.

Llegué y caminé unas cuadras hacia un restaurante típico americano para desayunar. Este era el momento para tomar en cuenta mis cursos de inglés.

Una vez que entré y ordené mi desayuno, me puse a mirar a mí alrededor, de verdad que era muy interesante todo lo que veía por allí.

Pagué y salí a disfrutar de esta oportunidad única. Más tarde llamaría a mis padres. Deberían de estar como locos. Ahora sería momento para disfrutar y divertirme.

Caminé hacia un mall cercano. Un poco de compras, no le hacían daño a nadie.

Esto era tan divertido. Estaba de compras, sola, en Los Ángeles. Wow.

Fui al hotel más cercano –y lujoso- dejé mis bolsas. Creo que en estos momentos tendría el aspecto de Alice encerrada en un centro comercial durante una semana.

Suspiré, me dejé caer sobre la cama, y después de unos minutos me quedé profundamente dormida.

Cuando desperté me dí cuenta que el sol ya casi estaba al otro extremo de donde se había quedado. Aproximadamente en una hora, éste se pondría.

Me dí una ducha, comí algo y salí a divertirme.

Esta vez fui a Hollywood, justo el sol se estaba ocultaba y yo solo disfrutaba de la hermosa vista.

Decidí ir a uno de los mejores restaurantes de Hollywood –lo había visto tantas veces en la tele- Obviamente no iba a comer, pues recién lo había hecho y estaba a reventar. Llegué al restaurante Beso (que tantas veces vi en Streets of Hollywood). Era común que diario te encontraras estrellas allí.

Cual fue mi sorpresa cuando me dí cuenta que se encontraba un centenar de paparazzi allí (no exageraba).

Me fui caminando lentamente hacia el lugar con los ojos cuadrados y la boca desencajada.

-¡¡¡Ay!!! –cual fue mi sorpresa cuando atontada avancé hacia el restaurante, tropecé con las cintas de mis zapatos y caí de bruces hacia el suelo.

Pero eso fue lo de menos cuando encontré que una mano morena aguardaba para ayudarme a levantar.

Estuve cerca de murmurar un “Thanks” cuando inevitablemente me perdí en esa hermosa mirada castaña y me derretí con esa blanca sonrisa.

No, esto era completamente irracional. Ahora si estaba soñando. Amanecer en Hollywood no era tan irreal como que me pasara esto. Necesitaba que alguien me despertara. Que alguien me diera un gran pellizco. Pero realmente ahora no quería despertar.

Mi mano temblorosa se apoyó en la suya y fue allí cuando me dí cuenta que era completamente real, mágico. Sentí como si una corriente eléctrica atravesara todo mi ser.

Yo seguía totalmente embobada cuando con su hermosa voz dijo lo siguiente:

-Hola, soy Taylor, ¿Te hiciste daño? – ¿me estaba preguntando eso? Era como un ángel.

Sus palabras me tomaron un poco desprevenida, pero hasta ese momento no me había dado cuenta de que me había torcido un tobillo. Nada grave, en unos minutos estaría bien, pero al apoyar el pie, me dolía un poco.

Fruncí el ceño, en una parte por el dolor y por otra parte porque había arruinado el momento. Recompuse mi rostro, no quería que Taylor se diera cuenta. Demasiado tarde. Me miró preocupado.

-¿Estás bien? ¿No quieres que te lleve al hospital? ¿Cómo te llamas? ¿Alguien vino contigo? –me bombardeaba con preguntas, a lo que yo sonreí.

Le dije cual era mi nombre tartamudeando y otras cosas más.

-Si, si vine sola, ehh no creo que sea necesario, solo me duele un poco el tobillo, en unos pocos minutos estará bien, puedo regresar sola, no te preocupes por mí –dije esto con una diminuta sonrisa en los labios, pero la felicidad no me llegó a los ojos.

Taylor soltó una carcajada y yo lo miré desconcertada.

-¿De verdad crees que te dejaré aquí? –si ya estaba derretida, a estas alturas debería de ser una masa informe y perpleja. Si antes amaba a este tipo, ahora quería lanzármele encima.

-Ven, te llevaré a tu casa, o… ¿No quieres venir a mi fiesta? ¿Sabes? Hoy es mi cumpleaños –Sonreí de oreja a oreja. Era cierto, desde hace meses había considerado un día especial para Taylor, ya que cumplía 18 años.

Claro, muchas felicidades, Taylor –fue lo único que pude articular.

-Entonces que dices, ¿Vienes? –Sonreí aún con más ganas

-Creo que sabes mi respuesta.

Soltó una dulce y hermosa risa y me ayudó a andar. Pasé mi brazo encima de su hombro y el hizo lo mismo con su brazo, pero lo pasó por mi cintura. Me aferró hacia su costado y pude sentir como mi felicidad no cabía en sí.

En realidad no era un abrazo, abrazo, pero sentirme envuelta por sus fuertes brazos –nunca creí que se sentiría así-

Seguimos abrazados hasta llegar al lugar, y el resto de la noche fue verdaderamente mágica.

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¿Qué habrá pasado? Pues tu decides, todo queda a tu imaginación :D

sábado, 6 de febrero de 2010

Tarjetas de San Valentín

Miren las tarjetas que nos traen nuestros amigos de http://www.twifans.com/
A mi me encantaron!!






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martes, 2 de febrero de 2010

Te extraño, te olvido, TE AMO

Disclaimer: Los personajes de Nessie, Jacob, Edward, Alice, Bella, Rosalie, etc, le pertenecen a Stephenie Meyer, mientras que Ashley, Sally y Brian a mí –aunque quisiera que fuera al revés- (por lo menos Edward y Jacob)
La canción “Te amo, te olvido, te amo” es de Ricky Martin.

Summary: Es el baile de graduación de Nessie, ella no acepta ninguna cita, hay algo que no la deja hacerlo, ¿O alguien?

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Te extraño, te olvido, TE AMO




Nessie se terminaba de arreglar para su baile de graduación de su último año de preparatoria. Llevaba puesto un vestido hermoso de color azul turquesa de corte strapless y un poco más arriba de la rodilla.

Su tía Alice le decía que iba a ser la más hermosa de la fiesta de la escuela “East Portland”.

Hace 3 años que se habían mudado de Forks a Portland, toda la familia se había mudado y Nessie era muy feliz ya que como hacía 2 años había dejado de crecer y el último año había sido prácticamente muy lento, había podido hacer 3 años completamente normales de preparatoria.

Había una sola persona que extrañaba de Forks, en realidad era de La Push y esa persona era JACOB BLACK.

La última vez que lo había visto había sido el verano antepasado, extrañaba mucho a su mejor amigo de la infancia, su mejor amigo siempre. Sus amigas Ashley y Sally eran geniales, pero no había nadie que la comprendiera igual que Jacob.

Nessie se puso una gargantilla de plata y una pulsera y aretes que le hacían juego, bajó las escaleras y cuando Edward la vio parecía que los ojos se le hacían cuadrados y se le salían de las órbitas, estuvo a punto de exclamar -¡Ponte algo más decente jovencita! –pero no lo hizo, sabía que su niña ya había crecido y se veía hermosa.

Nessie se despidió y no pudo evitar las fotos de recuerdo de las tías Alice y Rosalie. Bella también sabía que su pequeña Renesmee ya no era una niña y que lucía tremendamente preciosa.

Nessie tomó las llaves de su Audi y se fue directo a su escuela. El baile se llevaría a cabo en el gimnasio de la escuela. Tal como Bella, a Nessie tampoco le gustaba mucho bailar, sin embargo lo hacía muy bien y le encantaba convivir con la gente.

Nessie era muy bonita, de hecho era la más bonita de la escuela, además era muy dulce y tierna, y esto la hacía todavía más popular entre los muchachos.

Más de una docena la había invitado al baile pero ella los había rechazado a todos, hasta al capitán del equipo de futbol, que era un príncipe según sus amigas. Pero Nessie solo esperaba que uno lo invitara y tenía una piel morena y una sonrisa blanca cautivadora.

Nessie llegó a la escuela y aparcó el auto en un lugar vacío, ni siquiera lo pensó no podía pensar en nada. Estaba mareada sentía un dolor en su pecho que no la dejaba sentirse feliz en su baile de graduación –como debería de ser- pero no sabía que era.

-¡¡¡Vanessa!!! Nessie!! –gritaron Ashley y Sally al unísono.

-Hola chicas, woow que lindas se ven –llevaban un vestido morado y otro rosa respectivamente, eran bonitos, pero no como el que compró tía Alice para Nessie.

-Gracias Nessie tú también te ves súper. –respondió Sally

-Vamos, vamos, entremos –dijo Ashley

Las jóvenes entraron al gimnasio no muy bien decorado y notaron que la fiesta aún no empezaba, así que decidieron ir por algo de tomar, mientras llegaba más gente.

-Te dije que llegáramos más tarde –exclamó Nessie

De pronto se les acercó un chico –el capitán de futbol que Nessie había rechazado- Nessie hizo un mohín mientras sus amigas babeaban.

-Nessie, sé que te había pedido esto antes… pero… tal… vez… ahora –Nessie ya estaba negando con la cabeza.

-Lo siento Brian, pero… vine con mis amigas. –Brian asintió un par de veces.

-Claro… eh… nos vemos lue-go.

En cuanto se fue Sally y Ashley empezaron a ver a Nessie fijamente, Nessie se sintió cohibida.

-¿Por qué me miran así?

-Vanessa, acabas de rechazar al muchacho más lindo de la escuela… ¡De nuevo!

-No las iba a abandonar ahora chicas.

Después de que Nessie había rechazado a una docena de chicos, sus amigas decidieron no ir con nadie y acompañar a Nessie. Era un pretexto perfecto para no ir con nadie. Pero en realidad su verdadera razón era otra…

La música empezó a sonar, y pronto Nessie y sus amigas estuvieron bailando en el centro de la pista, cuando de pronto el DJ anunció algo:

-Y ahora, las canciones más románticas de la historia, para todos los enamorados. Las tres chicas suspiraron y se dirigieron a sus asientos.

Habían pasado un par de canciones cuando un par de chicos se acercaron a ellas.

-¿Qué no bailan? –les dijeron a Ashley y a Sally. Las chicas sonrieron con todas sus ganas, pero después la alegría desapareció de sus ojos y voltearon a ver a Nessie. Nessie asintió.

-Chicas vayan, diviértanse –Sus amigas soltaron un “gracias” sin sonido, solo con los labios y empezaron a bailar una canción muy lenta.

Decidió no ver hacia esos chicos –que no eran de la escuela- con esa piel morena y esos ojos oscuros le recordaban a alguien, que no quería ni mencionar porque lo extrañaba demasiado.

Justo en estos momentos Nessie deseaba estar abrazada a él con sus manos en los fuertes hombros de él. Y con las manos de él aferradas a su cintura, Nessie apoyando la cabeza en el pecho de él y el susurrándole cosas en el oído.

Nessie suspiró y después meneó la cabeza como si así pudiera dejar de pensar en Jacob.

Así que empezó a mover las manos –cosa que hacía cuando estaba nerviosa- y se detuvo a mirar el manicure que su tía Alice se esmeró en hacer.

-¿Y tu no bailas? –Nessie tragó en seco, esa voz… No, no podía ser «Debo estar loca, ya lo alucino« pensó. Pero esa voz nunca la olvidaría no podría estar tan loca, como para que esa voz la reconfortara tanto, siendo solo una alucinación.

Nessie levantó lentamente la cabeza, y lo vio… era él… ninguna alucinación… solo él… el hombre que amaba.

-¿Qué… ha-ces… a-qu-í? –titubeó Nessie

-Ni en sueños me perdería tu graduación –poco a poco la sonrisa de Nessie se extendió a toda su cara y soltó una carcajada.

-¿Cuál es el chiste? –susurró Jake con una media sonrisa, algo cohibido.

-Que al principio creí que eras una alucinación –Jake puso cara de excepción –me refiero… a… que ya te extrañaba demasiado, pero ahora se que estás aquí y eso es lo que importa…

-Claro que sí, no tienes idea de cuanto te extrañé –susurró Jacob con una mueca que después se transformó en una sonrisa - pero ahora se que estás aquí y eso es lo que importa…

Nessie sonrió y después soltó un suspiro

-Aún no respondes a mi pregunta –Nessie lo miró confundida –te pregunté que si querías bailar tontita.

-Claro que sí –respondió Nessie sin ni siquiera pensarlo. Lo miró a los ojos y después su vestuario, -por cierto –exclamó Nessie –te ves realmente guapo.

-Alice –aclaró Jacob. Nessie asintió.

Nessie puso las manos en los hombros de Jacob y apoyó en mejilla en el pecho de él, escuchando los reconfortantes latidos de su corazón y sintiendo el calor que inundaba cada célula de su cuerpo.

Tan rápido como empezaron a mover sus cuerpos, empezó el tono romántico de una canción:

Traigo en los bolsillos tanta soledad
Desde que te fuiste no me queda más
Que una foto gris y un triste sentimiento

Lo que mas lastima es tanta confusión
En cada resquicio de mi corazón
Como hacerte a un lado
De mis pensamientos
Nessie se aferró más al cuerpo de su amado y Jacob apretó más a su amado contra sí. Ninguno quería irse, ninguno quería que el otro se fuera.


Por ti, por ti, por ti,
He dejado todo sin mirar atrás
Aposté la vida y me deje ganar

Te extraño, porque vive en mi tu recuerdo
Te olvido, a cada minuto lo intento
Te amo, es que ya no tengo remedio
Te extraño, te olvido, te amo de nuevo...


-Por favor no te vayas, no me dejes –susurró Nessie
-Tu fuiste la que me dejaste –Nessie hizo un puchero –pero, no lo haré, ya no más… porque… -Nessie esperó, pero no hubo respuesta.

-Porque….

-Porque te amo, Nessie, te amo desde el primer momento en que te vi a los ojos, desde la primera vez que dijiste Jacob, y quiero que lo sepas, te amo, más de lo que una persona ha amado en toda la eternidad, ¿Tienes idea como te amo?

Nessie se quedó en silencio por unos segundos.

Si, como yo a ti –respondió Nessie.


He perdido todo, hasta la identidad
y si lo pidieras mas podría dar
Es que cuando se ama nada es demasiado

Me enseñaste el límite de la pasión
Y no me enseñaste a decir adiós
He aprendido ahora
Que te has marchado

Por ti, por ti, por ti...

Te extraño...


Y después Jacob apretó a Nessie más contra sí y Nessie acercó la cara de Jacob hacia ella, mostrándole todos los recuerdos y momentos que había pasado con él, contándole cuanto lo amaba.

Cuando sus labios rozaron, Jacob acercó sus labios al oído de su Nessie y susurró un “te amo”, solo eso bastó para que la pasión se mezclara a ambos y se besaran con más pasión y viveza que antes, para que sus lenguas jugaran salvajemente y su aliento llegara al lugar más profundo de su ser y así nunca olvidarlo. Para nunca olvidar ese sabor, esa sensación, a ese ser por quien darían la vida.